Drogas legales

El alcoholismo es un problema social muy grave. El alcohol, como cualquier otra droga, crea adicción y el enfermo de alcoholismo no tiene voluntad suficiente para evitar la tentación: tras una copita siempre va otra más. Asociaciones como Alcohólicos Anónimos combaten esta enfermedad intentando moldear la voluntad del alcohólico para que se autocontrole y evite un consumo excesivo de alcohol. En un futuro cercano, drogas inhibidoras de la proteína PKCe permitirán el tratamiento de estos enfermos. Científicos de la Universidad de California, San Francisco, han desarrollado genéticamente ratones que no tienen la proteína PKCe, y han conseguido que estos ratones sean más sensibles al alcohol y sean capaces de autocontrolarse.

Cuando se ofrece el consumo de alcohol a ratones normales, éstos se acostumbran a beber y acaban convirtiendose en alcohólicos, llega un momento en que sólo dejan de beber alcohol cuando están completamente borrachos. Los nuevos ratones sin la proteína PKCe son más sensibles al alcohol y muestran en su metabolismo las características propias de estar "contento" antes que los ratones normales. Más aún, estos ratones, tras beber alcohol hasta estar "contentos", se autocontrolan y pasan a beber agua. En promedio consumen una cuarta parte del alcohol que consumen sus congéneres normales.

Pero si hablamos de alcohol, también habrá que hablar de tabaco. Muchas personas dejan de fumar, con mayor o menor esfuerzo, y no recaen de nuevo. Otras, por el contrario, acaban recayendo y no pueden dejar de fumar. La mayor parte de la nicotina que fumanos se oxida en el hígado dando lugar a la enzima llamada cotinina. Estudios científicos publicados el año pasado indican que las personas con hígados que no realizan esta reacción química adecuadamente son menos adictos al tabaco y pueden dejar de fumar sin problemas. En estas personas la nicotina permanece en el hígado como N-óxido de nicotina, que es un antagonista de la nicotina, es decir, una sustancia que excita a nuestros receptores a la nicotina pero sin causar placer. Sustancias farmacológicas inhibidoras de la acción de la enzima CYP2A6, responsable de la oxidación de la nicotina en cotinina en el hígado, ayudarán a dejar el tabaco.

 

Francisco R. Villatoro

Profesor de la Universidad de Málaga